Las bodas del fin de semana

Lamento deciros que a pesar de vuestras peticiones poco voy a comentar de las bodas de este fin de semana. Las vamos a tener hasta en la sopa y estoy decepcionada porque llegue incluso a gustarme más la boda de Kate Moss con Jamie Hince que la serenísima boda en Mónaco. 

Empezando por esta última, puntualicemos:

  • El look de la novia me gustó: iba a su estilo y además fue como a mi me gusta, sencilla, sin estridencias ni joyas. Menos es más. Pero esa carita de angustia y de pena lo echó todo por tierra. Una novia que, aunque nerviosa o tensa, no irradie felicidad es muy triste. Y para mí ella lo fue, me entraron ganas de ir a Mónaco a recogerla para evitar que se casara.























  • El look del novio: creo que debería obviarlo, amén de sus besos (?¿) apasionados. Para llorar también.

  • Llega mi parte favorita: llevarle la contraria al Hola! y a 98% de las publicaciones de mayor peso, es mucha chulería por mi parte, pero es que aún me sigue llamando la atención ¡que consideren con todas las letras a Carolina de Mónaco y a Charlotte de Mónaco las más elegantes de la boda! Perdonadme, pero ya vayan de Chanel Haute Couture de la cabeza a los pies, no es elegante cuando no se tiene educación y sus caras de asco durante los días de las celebraciones dejan mucho que desear. Sus poros destilan altivez y prepotencia y lo siento, pero por mucha pamela que lleven, los sombreros no eran los adecuados y es que no saben llevarlos. Daros una vuelta por Sevilla en época de bodas y veréis a lo que me refiero con saber llevar una pamela o tocado. 
La invitada más elegante a mi parecer: Margarita Vargas ha sido toda una sorpresa. Esta chica, a pesar de ser joven suele ser algo triste  conservadora en sus estilismos y en esta ocasión la veo muy bien, un color algo oscuro, pero muy adecuada. La menos elegante: Inés de la Fressange, alguien debió aclararle que no iban a tomar un pincho en la playa. Sus sandalias planas y el sombrerito americano de los años 20 sobraban. 

  • Por último me gustaría decir que aunque muy a mi pesar la boda no haya sido todo lo glamurosa y estilosa que esperaba, me parece una tremenda falta de educación que no asistiera nadie de la Casa Real Española. Si el Rey no quiere ir  no está en condiciones de viajar , que mande representación como en otras ocasiones. La misma Reina Doña Sofía ha asistido en calidad de invitada sin acompañante unas cuantas veces. ¿Que Alberto fue desafortunado preguntando lo que preguntó para los JJOO? Eso quedó constatado y siendo la mayor representación de un cuerpo diplomático, debemos estar por encima de eso. No es tanto por asistir a la boda en sí, si no que al no acudir los que quedamos en evidencia somos nosotros.
Finiquitando la boda de Mónaco, nos vamos a la boda Rock & Roll de Kate. Con unas fiestas desfase de tres días, han conseguido que sea para mí la boda favorita sencillamente porque se les vio naturales, relajados y felices que al menos es lo que se espera de una boda. 



Era una chica casándose con su chico y tan felices, amigos que hacen fotos, cantidad de damas de honor cada una a su bola. Desenfadados, felices y disfrutando de la gente que les importan. Eso es para mí lo esencial de una boda.



Dicho esto, les deseo a las dos parejas que sean muy felices.

¿Qué opináis vosotros? ¿Cuál boda os ha gustado más? ¿Quién iba mejor vestida?

Comentarios

Marialu ha dicho que…
Yo me quedo con la de Kate, sin lugar a dudas!
Un beso,
Mlu
starenrojo
Cristina ha dicho que…
Estoy de acuerdo una novia tensa ,inexpresiva y poco feliz al lado de una alegre y pasandoselo bomba .....todo lo demas da igual ¿no?
Anónimo ha dicho que…
Tienes toda la razón, tenía una cara de pena... ya se dijo que no se quería casar.

Un abrazo!
Nacho
teresweetstyle ha dicho que…
la verdad es que hubo un poco de todo en esta boda, aunque la vredad es que hubieron bastantes elegantes, como Margarita, Carlota o su madre.

besitos!