¡Por Sevilla!

Aunque no lo hayáis notado (gracias al wifi en el hotel), llevo varios días en Sevilla. Me encanta. Decir que, entre deber y deber, he disfrutado mucho de la compañía de la gente y sus calles. Me he reencontrado con viejos amigos y quedado con amigos nuevos. De todas formas, ya se sabe, en Sevilla nunca se está solo: vas por la calle haciendo amigos. Y si no fuera porque el deber que me trajo me manda ya de vuelta a casa, me quedaba aquí todo el tiempo del mundo. Me lo he pasado realmente bien. 

Hoy brindaré sin té, con un café del Starbucks, por Sevilla, por volver muy pronto y por vosotros.